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10 billones de razones para no vacunarte
Ya he empezado la lectura del libro que acaba de publicar el prolífico Nick Delgado que te comentaba el otro día. 1
Nick Delgado habla con conocimiento de causa. Lleva 43 años en el campo de salud natural y es un reconocido coach antiaging (antienvejecimiento). Su largo currículum, además de varios libros, incluye ser profesor en la Universidad de Mastery del conocido gurú de l autoayuda Tony Robbins. Muchos de sus clientes son famosos doctores, ejecutivos, estrellas del fitness...
Traduzco unos extractos de "Blood does not lie" (la sangre no miente). Título modificado al prohibirle Amazon la palabra covid. Ya se sabe que solo la "narrativa oficial" es la permitida: estás a la merced de cualquier bicho que se te cruce en tu camino, no puedes fortalecer tu sistema inmune y necesitas una vacuna para seguir con vida.
Y claro el libro de Nick va de eso, de fortalecer tu sistema inmune frente al covid, o frente a cualquier otra amenaza.
Traduzco literal:
"No estás indefenso frente a la enfermedad. Tanto si te infectas como si no, o si te infectas y te enfermas gravemente, no depende del azar: todas las investigaciones científicas realizadas acuerdan en que los desequilibrios y el malfuncionamiento del sistema inmunitario dispara tu riesgo de contraer infecciones severas. Entonces, la mejor manera de protegerte de las infecciones es mantener un sistema inmune robusto"
Ahora con lo de la vacuna se habla mucho de anticuerpos. Los que genera el sistema inmune contra los antígenos, que puede ser cualquier patógeno como virus o bacteria, o también de una toxina.
Se estima que el sistema inmune puede generar 10 BILLONES de anticuerpos diferentes.
Si el cuerpo es capaz por sí solo y sin ayuda de generar semejante cantidad inimaginable de anticuerpos, por qué "necesitamos" una vacuna que nos modifique el adn para generar anticuerpos para el covid?
Dicen que los que no queramos vacunarnos tendremos que apuntarnos en un censo anotando las razones por las que rechazamos la vacuna.
Pues como no sé si me van dar espacio para poner esos 10 BILLONES de razones me contentaré con anotar que... soy mormón y mi religión me prohíbe la vacunación.
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https://www.terapiaclark.es/Newsletters/2020-12-27-inocentadas.htm
[REGALA BACTERIAS 🎁] en lugar de matarlas
Sigo traduciendo.
"La exposición a los patógenos juega un papel esencial en el desarrollo del sistema inmune. Permite a nuestro sistema inmune generar anticuerpos y otras defensas para protegernos"
ESENCIAL.
La exposición a los patógenos es esencial sobre todo de pequeños cuando nacemos con el sistema inmune sin desarrollar.
Ahora sin embargo a los niños se les baña en gel hidroalcohólico a todas horas a la vez que se les impida interactuar con sus semejantes y su entorno, impidiendo que su sistema inmune aprenda y vaya madurando.
En próximos boletines explicaré la dependencia TOTAL que tiene el sistema inmune del microbioma.
Muchos profesionales de la salud lo desconocen porque los estudios que lo develan son muy recientes.
De hecho el sistema inmune NO funciona sin microbiota.
Estudios realizados en ratones estériles lo demuestran. Se expusieron ratones estériles a un virus y el sistema inmune no hizo nada, no reaccionó, ni tan siquiera se inmutó. Cero.
No fue hasta que se inoculó la flora intestinal que el sistema inmune detectó al invasor. Sorprendente!
Pues resulta que el gel hidroalcohólico destruye la microbiota de la piel, anulando por tanto el sistema inmune y dejando la puerta abierta de par en par a la entrada de patógenos a través de la piel.
Y no solo destruye el microbioma sino la piel en algunos casos como una madre que me comentaba alarmada que debido al gel hidroalcohólico que obligaban a poner en el colegió su hija tenía las manos hinchadas, quemadas y muy afectadas.
Además de la exposición a patógenos el sistema inmune precisa de la interacción con el medio ambiente. Tocar la tierra y respirar aire (sin mascarilla) en plena naturaleza.
Tierra y aire, ambos impregnados de esporas de bacterias benéficas como la cepa de los Bacillus, que en el intestino pierden su dura capa protectora y comienzan a trabajar frenéticamente para sanar el intestino y restablecer el equilibrio de la flora intestinal.
A tus antepasados nunca les faltaba su ración diaria de esporas, pero hoy en día más que nunca en el mundo actual de confinamientos, mascarillas y geles hidroalcohólicos, es preciso suplementar con probióticos en esporas.
Las esporas despertarán a tu sistema inmune dormido como el Príncipe a Cenicienta.
[REGALA AGUA PURA 🎁] El sátrapa enfermo
El otro día tras mencionar en el boletín el juramento hipocrático1 que realizan los médicos al licenciarse, pero que desgraciadamente se ha vuelto en muchos casos, el juramento hipocrítico (de hipócritas) me llega por email una historia de un médico hipocrático.
Un médico, de la escuela de Hipócrates de la antigua Grecia.
Hipócrates, al que se conoce como "el padre de la medicina" y como supondrás, el que ha dado nombre al juramento hipocrático.
Es claro al leer la historia que este médico era de los hipocráticos, no de los hipocríticos, de los que te atienden por teléfono y si les dicen que te han empezado a doler las manos te responden que esperes unos años a que se te deformen y entonces te mandarán medicación para la artritis (historia verídica de hace unos meses con un médico de la Seguridad Social en Madrid, el mismo que quizás ahora esté llamando a sus pacientes para vacunarlos del covid porque para eso no hay que esperar).
Ahí va la historia:
En el mundo antiguo, un sátrapa persa estaba enfermo.
Los médicos de su corte no tenían remedio para él.
Por lo que hizo llamar a un médico hipocrático, por la fama que esta escuela tenía en toda Grecia.
Este llegó a sus dominios y en lugar de dirigirse directamente a ver al sátrapa, primero pidió que le llevaran a ver las fuentes y ríos que abastecían de agua en palacio.
Luego pidió que le acompañaran al mercado que abastecía las cocinas.
El sátrapa estaba enfadado porque ya habían pasado dos días y el médico todavía no lo había visitado.
El tercer día, el cocinero avisó al sátrapa de que el médico estaba en las cocinas.
Y no fue hasta el cuarto día que el médico le fue a visitar para realizarle el examen físico.
O sea, que lo PRIMERO que hizo el médico hipocrático, y que no habría hecho el hipocrítico, es asegurarse de que la fuente del agua que bebía el sátrapa era de calidad.
Y es que asegurarte de que bebes agua libre de contaminantes, cloro, flúor, químicos, metales pesados, restos de hormonas y medicamentos tiene que ser el primer paso a tomar para cuidar de tu salud.
El primer paso.
No es llevar mascarilla. Es filtrar tu agua.
Tu prioridad number 1: Filtrar tu agua.
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https://www.terapiaclark.es/Newsletters/2020-12-27-inocentadas.htm
Médico objetor de conciencia
Por fortuna todavía quedan médicos de la escuela hipocráticas como Arturo Vinuesa, que ha escrito un artículo que no tiene desperdicio en un diario de Navarra1
Como, a pesar de no tener desperdicio, no se lo han publicado completo por ser muy largo, te mando la primera parte de la versión original y mañana te mando la segunda, que para atracones ya tienes los navideños.
"Soy Arturo Vinuesa, médico de familia colegiado en Navarra y colegiado en la universidad de la vida hace 51 años. Hace un tiempo decidí colgar mi bata de la seguridad social, con sueldo fijo, para lanzarme a la inseguridad social de ser autónomo y buscarme las alubias cada mes, en una pequeña consulta. Lo hice porque solo tenía 7 minutos para cada paciente y, al meter en los Centros de Salud las historias clínicas informatizadas y los ordenadores, no podía tratar a mis pacientes como creía que se merecían.
Lo que nunca imaginé entonces es que los centros de atención primaria se convertirían en lugares de asistencia telefónica, donde la relación médico-paciente es un milagro y tampoco imaginé que mis colegas y yo, en vez de hacer el juramento Hipocrático, parece que hubiéramos firmado un juramento hipocrítico.porque hay situaciones, que hemos hecho cotidianas, y que hace pocos meses solo las veíamos en películas de ciencia ficción.
Estudié aquí en Navarra durante 10 años la carrera y la especialidad, y tengo otros 25 años de experiencia a pie de cama y camilla, acompañando a muchos pacientes y sus familias. creo que puedo hablar de la enfermedad con cierto criterio y sobre todo de la Salud y de cómo estimularla y mejorarla.
Antes de nada quiero aclarar que no soy un médico negacionista, ni antivacunas, ni antimascarillas, ni anti nada.soy un médico A FAVOR. A favor de la Salud con mayúsculas, a favor de nuestro sistema inmune y a favor del sentido común. Pero también soy una persona que tiene miedo de la repercusión de este artículo. Demasiados colegas y amigos han sido sancionados, amenazados y desprestigiados por decir lo que observan empíricamente en sus consultas e investigaciones y por tener una visión diferente y enriquecedora de la medicina.
Esta pandemia ha puesto en jaque a la gestión mundial de la Salud, al sistema sanitario de cada país y al sistema inmune de cada persona y nos ha puesto a todos con mascarilla, pero también de desenmascarado muchos talones de Aquiles en personas, instituciones, gobiernos y organizaciones transnacionales. Y de eso quiero hablar; de cómo nuestro sistema inmune, pero nuestro cerebro y sistema nervioso también, han sido tocados, y hundidos en algunos casos, debido a los muchos errores en la gestión de esta crisis: algunos por desinformación, otros por sobreinformación y la mayoría por el miedo provocado por dicha información.
En primer lugar diré que hemos dejado de tomar muchas vitaminas necesarias para nuestro bienestar físico y emocional. Nos hemos quedado sin Vitamina A. La del Aire puro, los Abrazos y los Amigos y nos la han cambiado por la vitamina A de Abuso de Autoridad. Nos han quitado la vitamina B de Besos y Bosques y nos la cambian por la vitamina V de Vacuna. Ya no hay mucha vitamina C de Cariño y Comprensión, pero sobra la vitamina C de Cobardía y Chantaje emocional. Lo mismo con la vitamina D de Dignidad y Derechos, que ahora se transforma en Distanciamiento, Dependencia, Desanimo, División.y así podríamos seguir con todo el abecedario de vitaminas.
En segundo lugar quiero decir que nuestros cerebros y nuestros sistemas nerviosos están siendo sometidos a un stress desmedido y desproporcionado. Resumir en pocas palabras años de neuro-psico-inmuno-endocrinología es difícil, pero lo intentaré. Cada vez que veo en el telediario las cifras de PCR+ y muertos con Covid, cada vez que no puedo visitar a mis amigos y familiares, cada vez que veo a mis hijos entrar en la escuela, haciendo cola, siendo apuntados en la sien, cada vez que paseo por mi barrio y veo negocios vacíos o cerrados, cada vez que alguien a mi alrededor da positivo, etc, etc.mi sistema nervioso entra en alerta y genera los neurotransmisores y hormonas del stress. Estos informan de que algo va mal y de que hay un peligro o amenaza cerca. Inconscientemente nuestro sistema nervioso simpático se activa y también se activa nuestro cerebro reptiliano de supervivencia.
Esto es genial para defenderse o huir de un peligro puntual, pero cuando los refuerzos negativos son diarios y continuos, esta activación excesiva del sistema nervioso es perjudicial para nuestra Salud, pues se anulan muchas funciones vitales para nuestro bienestar. Lo primero que caen son nuestras defensas, sobre todo CD4 y macrófagos (muy importantes en la inmunidad anticovid), después se anula el sistema nervioso parasimpático (que es donde el cuerpo se relaja y se cura de sus enfermedades, desde una gripe hasta un cáncer). También nuestro cerebro racional y emocional se anulan, porque prima la supervivencia y baja mucho nuestra memoria, nuestro sentido crítico, nuestra empatía y resiliencia, etc. Esto provoca, según las personas, una actitud de parálisis, enfado o negación y en las sociedades conlleva polarización y división. Es decir, cual animales acorralados, nos quedamos paralizados, huimos o atacamos.
Y así tenemos 3 tipos de personas: unas, generalmente mayores, que están en casa paralizadas, delante del telediario, sin atreverse ni a bajar a por el pan, ni mucho menos a que sus nietos vengan a darles un poco de Vitamina A, B y C. Otros son los que atacan y van por la calle increpando a los que llevan la mascarilla sin tapar la nariz o llamando a la policía si ven cosas extrañas en el barrio. Y por último están las personas que huyen de esta situación: y para mi hay muchas formas de huir; una es bajarse del barco y despedirse de la vida (mis amigos psiquiatras están muy preocupados por el aumento de suicidios que está habiendo y que no salen en los telediarios). Otra es negarlo todo e ir a la contra (negacionismo extremo). Pero, para mí, la más frecuente es la huida hacia adelante, es decir, agachar la cabeza, obedecer lo injusto, seguir en piloto automático, y dejar mis derechos y mi conciencia detrás.y ahí es donde creo que estamos la mayoría.
Esta huida hacia adelante, más la avitaminosis y la activación nerviosa, unida a los 5 Gansos que gobiernan países y los medios creadores de opinión, provoca un colapso seguro en nuestros mecanismos de defensa y de nuestros cerebros, que han sido jackeados y derribados por este virus, pero que igualmente hubieran caído ante cualquier pequeña amenaza que pasara cerca. Anulado nuestro sentido común, nuestra capacidad de juntarnos y crear algo unidos y manteniéndonos con las dosis justas de noticias contradictorias y deprimentes, somos una sociedad perfecta y sumisa.
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https://www.noticiasdenavarra.com/opinion/tribunas/2020/10/14/medico-familia-objetor-coronavirus-navarra/1086256.html
Muy Objetivamente,
Mónica "de la escuela hipocrática" Santos
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